Este libro de Daniel Cassany «El arte de enseñar» es una propuesta puramente didáctica para enseñar a los docentes a dar clase desde el primer momento, a tratar al alumnado, a conocer los contextos… En uno de sus capítulos nos ayuda a identificar las noticias y los discursos falsos.
Dado que en estos momentos nos encontramos cada vez más con este tipo de discursos, me ha parecido bien destacarlo y propagar sus ideas porque seguro que nos pueden ayudar en esta etapa de hiperinformación que nos llega por todos los medios y con las cuales tenemos que luchar a diario entre familiares, alumnado, grupos de amigos…
Leer no es juntar palabras y darles sonidos, leer es comprender, dar sentido a esas palabras que se unen y nos expresan ideas y pensamientos de la persona que escribe. Leer es crecer, por eso los niños y las niñas se sienten tan orgullosos cuando dicen:»Yo ya sé leer».
En nuestras manos de docentes y familias está fomentar esa lectura, darles ejemplo de familias lectoras, tener una estantería con libros para que los puedan coger cuando se les antoje.
Pero desde el primer momento que empiezan a leer hay que acompañarlos y hacerles preguntas para asegurarnos que comprenden lo que leen. A medida que van cumpliendo años hay que formarles en ser lectores críticos. Hoy, en las redes se difunden noticias falsas que pueden hacer daño y herir la sensibilidad de los lectores.
Nos dice Daniel Cassany en su libro «El arte de dar clase» que actualmente debemos formar al alumnado para que pueda defenderse de bulos, rumores, publicidad, proselitismo, noticias falsas… y que la educación lingüística reclama hoy propuestas como estas que vamos a relatar a continuación, encontradas en el cuadro 55 del libro anteriormente citado: Sigue leyendo
Durante años el docente ha ejercido el papel principal en sus clases, ha ido a soltar su paquete de conocimientos y el alumnado lo ha ido escuchando, en algunos casos con resultados positivos y en otros desconectándose de la materia a los quince minutos, con los problemas que esto puede acarrear en cuanto a disrupciones y mal clima en el aula.
A algunos profesores o profesoras da gusto escucharlos, te van entusiasmando y abriendo la curiosidad en cada momento, pero también los hay que son planos, que solo se hablan a ellos mismos, que no comunican, que aburren a las moscas… y esos son los que tienen más problemas de disciplina en sus clases, es evidente que su palabra no llega al alumnado y que necesitan trabajar otros campos de comunicación.
Teresa Baró en su libro «Inteligencia no verbal» nos da pautas para una comunicación en la que no solo la palabra sea lo que transmita, no da pautas para descubrir si el alumnado se está aburriendo, nos da pautas para conectar con el alumnado con expresiones, movimientos en clase…
Nos dice Baró en su libro que los movimientos y los gestos del profesor o profesora son una forma de expresarse, son parte de su identidad y también son el reflejo de su estado de ánimo ese día, y de la actitud que tiene hacia su trabajo y hacia su alumnado. La expresión no verbal, sin contenido curricular, apoya las palabras, las subraya, las complementa, las hace creíbles, las dota de emociones como el entusiasmo, la comprensión o la ternura. Y algunas veces las devalúa o contradice: muestra el cansancio del docente, refleja el poco interés por el tema, el desprecio mal disimulado por el alumnado, la inseguridad o el miedo por estar allí, la falta de sintonía con otros docentes, el hastío de la profesión… Sigue leyendo
Las alumnas de Griego de 2º de Bachillerato D hemos elaborado este comunicado para poner de manifiesto nuestra opinión y consiguiente protesta sobre la situación de las Humanidades en este instituto. Hemos de decir, primero de todo, que ningún profesor, ni de idiomas, ni de Lengua Castellana y Literatura, ni del departamento de Filosofía y Cultura Clásica, ha tenido nada que ver con nuestra protesta. Este documento es obra exclusiva del alumnado, poniendo en práctica nuestro derecho a protestar por cosas que conciernen a nuestra educación, y sobre todo, a la de quienes vienen tras nosotras.
Hemos escrito este documento para denunciar, en especial, la situación de la asignatura de Griego. Nuestra promoción ha sido la única en cursar dicha asignatura en el Néstor Almendros en casi una década, 13 alumnas entre todas las chicas y chicos que han pasado por Bachillerato en Tomares en los últimos diez años.
Para empezar, hemos recopilado algunas de las razones, innumerables, por lo que es importante para un alumno de Humanidades, y para todo el mundo, tener un conocimiento básico de lenguas clásicas:
· El griego es la lengua madre de la nuestra, el castellano. Todo nuestro idioma está construido sobre el de los helenos, y una inmensa cantidad de vocablos han pasado directamente a nuestro diccionario con apenas alguna variación a lo largo de los siglos. Los alumnos de latín, y sobretodo los de latín y griego, hemos encontrado grandes facilidades al estudiar otras asignaturas gracias a nuestro conocimiento en lenguas clásicas. Entendemos mejor Filosofía y Psicología, así como Lengua Castellana, Inglés o Francés, pues conocer el origen de las palabras nos hace comprenderlas de una forma más profunda.
· Así como nuestro idioma, nuestra civilización es descendiente directa de la Grecia Antigua. Nuestro sistema político, nuestras costumbres mediterráneas, nuestra cultura y conceptos tan universales como nuestra percepción de la estética han sido heredadas directamente de los griegos. Hay que conocer de dónde venimos para saber a dónde vamos, dice el dicho popular. Si entendemos la lengua de una civilización, cómo hablaban, entenderemos también cómo pensaban, por qué hacían lo que hacían, qué hizo que nosotros seamos como somos en la actualidad. Además, la parte cultural de la asignatura, a parte de resultarnos también ventajosa para Filosofía, Historia de España e Historia del Arte, entre otros, nos da una visión más amplia y profunda de los reyes, filósofos y poetas que forjaron Occidente.
· En los últimos tiempos, la educación ha sido monetizada. Se favorece a las ramas del conocimiento que son “rentables”, como Economía, o las ciencias puras, pues se ha extendido la creencia que estudiándolas nos labraremos un futuro más brillante y prometedor. Hemos olvidado que la primordial función del conocimiento debe ser el conocimiento mismo. El saber por saber. No son pocas las veces que hemos tenido que sufrir comentarios como “¿para qué estudias eso?” o “las letras no sirven para nada”. Incluso tenemos que oír a nuestros propios compañeros llamarnos “letrasados”, desmereciendo nuestro trabajo y nuestras capacidades. Así que, por fuerza, los estudiantes de Letras tenemos una vocación por la que merece la pena aguantar todo eso. No queremos monetizar nuestro conocimiento, simplemente estamos movidos por nuestro amor a la cultura y a las lenguas. Pero no paran de ponernos piedras en el camino.
Si es así, y tantas ventajas tiene, ¿por qué cuando llega 1º de Bachillerato apenas hay solicitudes para cursar griego? Esta pregunta tiene fácil respuesta: no se le da la promoción que se debe. Durante nuestro paso por la ESO, exceptuando Lengua Castellana y Literatura, Inglés e Historia, la inmensidad de asignaturas que cursamos son de la rama científica del conocimiento: Biología, Matemáticas, Física y Química, Tecnología… Los alumnos que elegimos Humanidades tenemos que comenzar de cero, muchas veces sin saber lo que vamos a encontrarnos, y eso es lo que disuade a muchas personas, además de los prejuicios, de elegir nuestra modalidad.
Esto podría tener fácil solución. La asignatura de Cultura Clásica, que es una especie de introducción, tiene contenidos similares pero no se parece en organización ni en método de estudio a la de un idioma. Al llegar el momento de elegir, 3º y 4º de la ESO, debería informarse exhaustivamente al alumnado sobre aquello que aprendería en Latín y Griego, pues como ya hemos dicho antes, al nunca haberse cursado, se llega a clase sin saber qué vas a encontrar. Nosotras, desde luego, nos encontramos con una maravillosa sorpresa.
Todos los anteriores son argumentos con los que ya han luchado muchas asociaciones de Lenguas Clásicas, pero además nosotras, ya que parece haber una generalizada obsesión por Selectividad, hemos añadido más. “Griego no sirve para nada”. Bien, estas son todas las carreras universitarias, sólo en la Universidad de Sevilla, para las que la asignatura de Griego pondera 0’2:
· TODAS las filologías, pues como ya hemos dicho es una lengua clásica base de las lenguas romances. Por mencionar sólo unas pocas:
Filología Hispánica
Filología Inglesa
Filología Francesa
Filología Alemana
Y todos los dobles grados que las incluyen: Magisterio y Estudios Franceses, Filología Clásica y Filología Hispánica…
· Arqueología
· Geografía e Historia
· Educación infantil
· Educación primaria
· Estudios franceses
· Estudios ingleses
· Educación social
· Estudios árabes e islámico
· Estudio de la Asia Oriental
· Filosofía
· Historia del Arte
· Humanidades
· Traducción e Interpretación
· Lengua y Literatura
· Lingüística
· Lenguas Modernas
· Periodismo
Por tanto, no podemos comprender cómo no es una asignatura fundamental en Bachillerato, la hayan elegido 30 alumnos o 3. Muchas veces, como ha pasado este año en primero, estudiantes de Humanidades se han visto obligados a cursar Economía, una asignatura igual de válida e importante, pero que nada tiene que ver con la rama del conocimiento a la que quieren dedicarse.
Las alumnas de Griego queremos señalar que la asignatura en 1º, y lo que llevamos de 2º, ha sido ardua pero fuertemente gratificante. Como si las piezas del puzzle de repente encajaran. De esto tiene mucho la culpa una de las profesoras más competentes de las que nos hemos encontrado, Encarnación Yáñez, que comparte su pasión con nosotras y nos hace querer saber más y más. Desde aquí, gracias, Encarna, por todo, nunca podremos agradecértelo suficiente.
Firma para que se fije la asignatura de Griego en Bachillerato. Es de vital importancia tanto para el desarrollo intelectual como para el acceso a la universidad. Nosotras nos vamos este año y no estaremos aquí para verlo, pero como alumnas de Latín y Griego nos vemos en la obligación moral de defender las Humanidades y a aquellos que vienen tras nosotras.
Nacida en Abanto, cuenta que ha sido una niña que resolvía problemas matemáticos y que le gustaba explicar cómo había llegado al resultado y escuchar a otras compañeras hablar también sobre sus ejercicios. Así que ha sido alumna, maestra, directora de colegio, pedagoga o inspectora de educación.
Ha trabajado en programas de innovación educativa en el departamento de Educación del Gobierno Vasco y ha presidido hasta no hace mucho el Consejo Escolar de Euskadi.
Nélida Zaitegi habla sobre la acción de educar de una manera que dan ganas de volver a clase. Cree que hay que buscar lo máximo que puede dar cada alumno, alumna, y que eso es el éxito y la excelencia. Defiende que educamos en primer lugar para crear buenas personas, luego buena ciudadanía y para terminar, buenos y buenas profesionales.
Además de en la formación de directivos de centros educativos, Zaitegi también ha trabajado elaborando protocolos y guías de actuación sobre el acoso y reflexionado sobre el acosado, el acosador y los que miran y no hacen nada.
Nélida nos da una buena lección de cómo debemos educar, cómo tratar al alumnado, cómo desarrollar el pensamiento crítico, cómo afrontar los dilemas morales para abordar valores éticos que nos hacen vulnerables, desde qué principios éticos nos fundamentamos… Para educar hace falta una buena tribu.
Aunque se está avanzando en el terreno de la inclusividad aún quedan muchos asuntos que tratar y estudiar para conseguir una mejor inclusión tanto en la escuela como en la sociedad.
Gracias a Plena Inclusión por facilitarnos esta interesante entrevista.
Gerardo Echeita nos responde a las preguntas:
Gerardo Echeita, es profesor titular de universidad, en el Departamento Interfacultativo de Psicología evolutiva y de la educación de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM). Especialista en políticas sobre educación inclusiva y atención a la diversidad, con una amplia y acreditada experiencia docente, investigadora, y en asesoramiento a centros escolares.
(Imagen Sofía Aguilera)
Este texto es tan interesante que no podía dejarlo pasar en el olvido cuando cerrara el libro al finalizar su lectura. Está extraído del libro «El niño filósofo» de Jordi Nomen. Argumenta la importancia de la lectura como medio para hacer reflexionar al niño o la niña, la lectura es un recurso imprescindible para el aprendizaje y es por ello que debemos fomentarla y practicarla con nuestros niños y niñas.
Según Freire (2014), citado por Nomen, el lector profundo hace hipótesis y deducciones, y se cuestiona la ambigüedad del lenguaje.
Según Nomen leer es:
Si no lees, tu mundo será pequeño; tu mente, estrecha, y tu capacidad de disfrutar, bastante limitada.
El buen lector no está nunca solo, y si los niños aprenden a reflexionar sobre lo que leen, como filósofos, conseguirán un preciado tesoro.
(Las imágenes están sacadas de Google)
Para aprender se necesita un mínimo de circunstancias favorables que no distraigan la mente con otras circunstancias adversas.
Cuando enseñamos a los niños y las niñas a crearse un ambiente de estudio les decimos:
– Una mesa ordenada, con todos los materiales que vayas a necesitar.
– Una habitación agradable en cuanto a luz y temperatura.
…
Pues resulta que en estos días estamos viviendo situaciones muy desagradables en nuestras aulas:
– Temperaturas muy bajas, lluvia y viento. Nieve en muchos sitios de España.
– Ventanas abiertas por la situación de Pandemia que estamos sufriendo.
¿Es humano que nuestro alumnado y nuestro profesorado esté pasando por esto?
¿Quién va a estar atento a lo que se trabaja si se encuentra frío y molesto por circunstancias ambientales?
La situación es delicada y nada favorecedora del aprendizaje. En algunos sitios se han suprimido las clases presenciales y se ha vuelto a la enseñanza online.
Si tan mal vamos con los contagios después de las Navidades por qué no se vuelve a la enseñanza no presencial.
Quizás no sea una medida muy popular por lo que lleva de problemática en cuanto a la conciliación familiar pero yo creo que hay que arreglar esta situación.
Esta historia interesante de los inicios del Método de María Montessori, nos la relata Cristina De Stefano en la gran biografía que ha editado en la editorial Lumen en 2020, «El niño es el maestro» Vida de María Montessori. Por aquí podéis ver la reseña.
Édouard Séguin es un joven necesitado de dinero. En 1837 acepta el puesto que le ofrece Jean Marc Gaspard Itard, un médico anciano que se había hecho famoso por haber intentado educar al «salvaje de Aveyron», un niño capturado en los bosques por unos cazadores. El niño parecía un animal, no hablaba, no miraba a los ojos, dormía en el suelo…
Itard consigue el permiso para educarlo y durante cinco años lo acoge en su casa y le dedica todo su tiempo, ayudado por un ama de llaves. Es el comienzo de un drama educativo extraordinario, que cambia para siempre la historia de la Pedagogía. Pionero de las disciplinas transversales en la educación y quien realizó los primeros ensayos de la pedagogía experimental. (Martínez-Salanova y Peralta)
Para tratar de educar al niño, al que rebautizó con el nombre de Víctor, el anciano médico Itard elabora un método basado enteramente en el estudio del alumno, en vez de en las ideas del maestro. Observa a Víctor día y noche, anotando cada detalle. Refiere cómo el niño se pasa horas durante el día mirando el paisaje por la ventana y mirando la luna por la noche, como si sintiera nostalgia de los bosques en los que vivía anteriormente.
El comportamiento de Víctor era digno de estudio: Si nieva se precipita al jardín y rueda por tierra, comiéndose la nieve a puñados. Cuando sale a pasear, corre dando brincos, como si fuera un animal, e Itad corre a su lado. Incansable y paciente el médico obtiene los primeros progresos.
Víctor empieza a dormir siguiendo ciclos regulares, a controlar su forma de comer, a desarrollar la sensación de frío y calor. También empieza a sufrir sus primeros resfriados a los que antes parecía inmune.
Itard idea para él toda clase de ejercicios educativos. Trabaja su atención escondiéndole objetos en tazas puestas boca abajo, le hace practicar el sentido del tacto con unos saquitos que contienen objetos diversos, le muestra los diferentes tamaños de los objetos, le enseña las figuras geométricas que ha recortado en madera y que debe encajar en los huecos…
Obtiene resultados pero se topa con la imposibilidad de enseñar al niño a leer y escribir. Víctor no comprende el sistema simbólico de la escritura. Desanimado devuelve al niño al instituto de sordomudos de París y allí murió a los cuarenta años aproximadamente, cuidado por madame Guerin, el ama de llaves que le ayudó desde el principio. Sigue leyendo
El capítulo 9 del libro«Esto lo hago yo» (Residencias de arte en la escuela) de Eva Morales Gómez (ed.) está dedicado a la experiencia que Antropoloops llevó en el CEIP San José Obrero de Sevilla, un centro con una mayoría de alumnado migrante y etiquetado como «centro de difícil desempeño» por parte de la Administración educativa. Está situado en un barrio obrero y acoge también a niños y niñas de un poblado chavolista. Los contextos también influyen en los aprendizajes y , en este caso es más que evidente por sus peculiares características.
La narración, de lo que estaban experimentando en torno a la música, está hecha de forma amena por Fran Torres y Rubén Alonso. En primer lugar destacan la buena disposición del profesorado y el Equipo Directivo ante tan novedosas propuestas de talleres. Fue el propio profesorado el que los invitó a relacionarse más con el claustro, circunstancia que invitaba a pensar que lo que hacían no les parecía nada extraño y que empezaban a formar parte de las actividades cotidianas del centro. Destacan también cómo el profesorado es capaz de convertir cualquier experiencia cotidiana en una posibilidad de reflexión y aprendizaje con su alumnado.
Dada la buena disposición y flaxibilidad del profesorado las intervenciones empezaron en las clases de Música y siguieron expandiéndose en Lengua, Inglés, Ciencias y Educación Física, algo que estaba facilitado por el enfoque multidisciplinar de los talleres y la actitud abierta del profesorado involucrado. Sigue leyendo
Jordi Nomen, Licenciado en Historia Contemporánea y Profesor de Filosofía en la Escuela Sadako de Barcelona. Señala en su libro ‘El niño filósofo’ la importancia de las Humanidades en la educación de los niños.
Nomen hace referencia a la Filosofía como un elemento básico de la ciudadanía que debería estar presente en todas las escuelas para potenciar el pensamiento “crítico, creativo y cuidadoso”. Para Nomen, este último tipo de pensamiento es de especial importancia para tener en cuenta el impacto que nuestras acciones tienen sobre otros.
Hacer pensar a los niños y las niñas nos va a garantizar que lleguen a ser adultos con sus propias ideas y no se dejen llevar por lo que otros les digan. No es tan difícil hacer pensar a edades tempranas, se trata de que en sus niveles apropiados tomen decisiones y sepan ver varios caminos a los que acudir en caso de tener que realizar cualquier acción. A los niños y las niñas hay que ayudarles, hay que presentarles problemas para que piensen, hay que ayudarles a crear pensamiento crítico que no se trata nada más que de poder pensar haciendo reflexión personal de aquello que lo necesite.
Algo en lo que hay que educar es en el bien común, sacar a los niños y las niñas de esos momentos en los que todo lo quieren para ellos y no piensan en los que están a su alrededor. El bien de todos y todas será beneficio para la comunidad y por tanto, también revertirá en el bien de cada persona.
Es una garantía para la sociedad el tener a personas reflexivas que vayan en busca de sus propios ideales y no se aborreguen con las ideas de otros más poderosos. El poder te lo dan tus propias afirmaciones, mientras que si no sabes por dónde tirar te dejarás llevar por las ideas más poderosas que te presenten los que están en los estamentos establecidos. Sigue leyendo