Agradezco a la comunidad de zemos98.org el espacio que me facilita para expresar mis ideas.
Este diario antes estaba en la Web del IES Profesor Juan Bautista en el que permanecen las entradas desde el 31 de mayo del año 2006 y donde he ido relatando penas, alegrías, problemas y satisfacciones que me ha ido dando el día a día del trabajo.
Como ahora ya estoy jubilada lo que pretendo es seguir escribiendo de viajes, lecturas, opiniones… que va transcurriendo en mi jubilosa vida.
Ver nacer un libro es siempre una alegría y este ha nacido el Día de la Lectura en Andalucía. La presentación se hizo con buen cante, como corresponde a nuestra tierra, con alegría y con un buen público asistente. ¡Enhorabuena a los organizadores e investigadores!
En la Casa de la Cultura, ayer día 16 de diciembre de 2011, se presentó el libro: «EL PATRIMONIO DE LOS ALCORES: UNA PROPUESTA DE PARQUE CULTURAL».
Fue un acto sencillo, sentido, entrañable… Las presentaciones de los organizadores y autores de la investigación, se fueron mezclando con el cante y con las imágenes… visualmente era un marco precioso, el cante, adaptado a las circunstancias nos fue haciendo sentir el espíritu de lo que se presentaba y se reivindica en este libro, un Parque Cultural.
Una presentación de Javier Santos nos fue mostrando la grandeza de estas localidades, con buena música y muchas fotos que mostraban el patrimonio que no se debe perder.
Se propone la creación de este Parque Cultural para mostrar la riqueza de LOS ALCORES formado por los pueblos de: Alcalá de Guadaíra, Carmona, El Viso del Alcor y Mairena del Alcor.
En la entrada, Mati y José Ángel (la misma persona que presentó el libro), dos de los organizadores, con una sencilla caja de cartón, con un letrero a bolígrafo, junto a una montaña de libros, nos pedían un donativo porque el libro ha sido subvencionado por los propios colectivos, no ha tenido subvenciones externas que le hayan ayudado, un detalle más del escaso interés por el tema que se vive en las cuatro localidades mencionadas anteriormente.
Esta reivindicación con casi 20 años de vigencia, algún día será estimada y nos lamentaremos de lo perdido en los años anteriores.
Esperamos que el nacimiento de este libro levante conciencias culturales y cívicas, por el bien de la comarca en la que muy felizmente habitamos.
Presentación del libro: EL PATRIMONIO DE LOS ALCORES: UNA PROPUESTA DE PARQUE CULTURAL on PhotoPeach
Hasta el último día este viaje ha estado repleto de sensaciones que superan todo lo que con palabras se puede contar, encontrarte de frente con esa montaña de hielo, exige que se respete la Naturaleza para que muchas personas puedan disfrutar de esas vistas tan agradables para los sentidos.
Para más información ver aquí y en la Wikipedia.
Glaciar Perito Moreno
Si pinchas en la imagen podrás ver la grandiosidad de este Glaciar.
Blanco de hielo, pero a su vez azul que refleja no el agua lechosa de los glaciares sino la antigüedad, hace vetas de un azul cielo y en la cumbre hace picos formando figuras caprichosas, a lo largo de esa tremenda montaña también podemos ver fisuras y grietas producidas por los desprendimientos, todo su alrededor está lleno de icebergs que se han ido desprendiendo y siguen dándole belleza al lugar.
Vetas negras que reflejan también la antigüedad, se dice de 500 años en su primera parte, hasta tal punto que encima de esa montaña helada ha crecido vegetación.
El entorno es maravilloso, hay unas pasarelas y unos miradores a través de los cuales se pueden ver muy cerca, casi que parece que lo vas a atrapar; con el catamarán llegamos muy cerquita y disfrutar de ese momento parece que es un lujo del cual la vida nos ha dado la oportunidad de disfrutar.
Otro momento inolvidable fue escuchar el ruido que produce el glaciar, un rugido parecido al de una tormenta que te estremece y te pone en expectativas de mirar hacia todos los lados por si se produjera la ruptura o los desprendimientos, pudimos ver cómo caían pequeños trozos, pero no la gran ruptura que se pueden ver en algunos vídeos.
Si quieres ver más fotos pincha aquí.
Hoy hemos estado en el Parque Nacional de los Glaciares, un paisaje muy desconocido en nuestra experiencia viajera y que ha estado lleno de agua, nieve, hielo, témpanos, naturaleza verde… y todo el día montados en un catamarán, desde las 9 de la mañana hasta las 16 h de la tarde. Otra experiencia que hay que vivir al menos una vez en la vida.
Si en Iguazú hacía calor y me picaron los mosquitos, hoy en la Patagonia hemos pasado frío hasta el punto de ponernos chaquetones, gorros…
Hemos estado en el Parque Nacional de Los Glaciares, a unos 40 minutos de El Calafate, la sensación de ver el lago helado por sus orillas fue grande, es un paisaje al cual no estamos acostumbrados, ni siquiera es frecuente que vayamos a la nieve, por lo cual la impresión de que esos témpanos de hielo se vayan haciendo cada vez más grande hasta formar montañas es algo que no se podrá olvidar.
Hemos podido contemplar y acercarnos con el catamarán al gran glaciar Upsala, al glaciar Spegazzini y al glaciar Seco. En todos ellos hemos podido comprobar pequeños desprendimientos que, según la guía, se están produciendo porque son glaciares que van en retroceso debido al calentamiento global de la tierra.
Comprobar esas montañas de hielo es precioso, hay que pensar que hay dentro del agua otro tanto solidificado. Se forman figuras caprichosas que hacen recordar animales, plantas, personas…
Casi todo el tiempo hemos ido en cubierta porque no era algo para ver entre las ventanas del barco, había que pasar frío, mojarse, sentir la fuerza del día soleado y comprobar que la naturaleza es muy caprichosa y que siempre tiene algo que hay que admirar.
Hemos volado hasta Iguazú, una hora y media de vuelo, con unas vistas verdes impresionantes, al aterrizar el avión parecía que se iba a posar en la copa de los árboles, todo era verde. Impresionante la Garganta del Diablo y la vista de las cataratas desde Brasil.
Entrar en el Paraje Natural de Iguazú (Garganta del Diablo) es sentirte en plena naturaleza y observar cuánto beneficio se puede hacer para mostrar el medio ambiente si se le cuida bien. Letreros, papeleras, caminos, tiendas… todo está metido en el ambiente de forma que nada estropea la vista impresionante de este paraje natural.
Por el paseo hemos visto un montón de mariposas (posándose sobre las manos de la gente), urracas, tortugas y algunos pájaros que no conocemos ni los nombres.
«La garganta del Diablo es un conjunto de cascadas de 80 m de altura que se desprenden hacia una angosta garganta la cual concentra el mayor caudal de las cataratas del Iguazú, siendo a su vez estas cataratas las de mayor caudal del mundo»(vía Wikipedia)
La garganta del Diablo se encuentra localizada en la frontera de la provincia de Misiones, en el Parque Nacional Iguazú, Argentina con el Parque Nacional do Iguaçu del estado de Paraná, Brasil.
Hay que dar una caminata, te montas en un trenecito y te lleva al espectáculo lindo de la naturaleza. Es impresionante ver la fuerza que lleva el agua y el espectáculo que forma al caer, cuando viene de vez en cuando una brisa y pone al personal chorreando, es superagradable sentir la fuerza de esa agua en la cara, algo parece que te está acariciando, algo que no te molesta porque te integra en el paisaje, te abraza con la brisa del agua, me refiero en este día de calor, me imagino que para los visitantes de invierno debe ser más cortante y no sentirán el agua como un alivio del calor que nos invadía.
Tomo prestado el vídeo de cancionesdelsur07 hasta tanto monte el mío, para que veais lo bonito de esta garganta.
Al día siguiente hemos entrado en Brasil para ver las cataratas desde la otra orilla, si espectacular fue ayer no sé qué adjetivo más grande puedo poner para expresar lo visto y sentido ante la mirada de las cataratas desde la orilla de Brasil. Se ven en conjunto, con todo su esplendor, toda su fuerza y el ruído es impresionante.
Hemos hecho el recorrido de unos dos kilómetros y a mí se me ha pasado volando, no me cansaba de mirarlas y de disfrutar de ese incomparable paisaje. Para colmo de las sensaciones nos hemos montado en una lancha que nos ha paseado por el río y nos ha metido dentro de la catarata, he disfrutado muchísimo, me he reido, nos hemos puesto chorreando y nada me ha molestado, pocas sensaciones dentro de la naturaleza me han llevado a sentir esa impresión que hay que vivirla para entender de qué se habla.
El viaje está siendo un lujo de detalles que avivan los sentidos más despiertos, por supuesto que volvería mañana mismo y que me traería a los míos para sentir la felicidad completa.
Todo el mundo advertía que no nos saliéramos de la calle Caminito, centro totalmente turístico, de día no pasa nada pero de noche no es lugar recomendable por los enfrentamientos que en este barrio se dan.
Efectivamente no nos salimos de la calle Caminito, sus pintorescas casas, de colores muy variados nos ha dado para pasar allí la mañana y visitar lo entrañable del lugar, casas, restaurantes, tiendas, tango en la calle, artesanos… todo hace un conjunto espectacular.
Me gusta el colorido y lo típico del lugar, esta calle está muy cuidada y los artesanos están realizando sus obras en plena calle.
Aunque sea con el bolso bien agarrado no hay que perdérselo y hay que disfrutar de esas terrazas con el tango en directo, a cualquier hora del día.
Para ampliar información podéis leer aquí.
El Museo Malba es de arte contemporáneo, tiene pocos años de vida y ha nacido con el fin de mostrar el arte latinoamericano, tiene fines didácticos y en él se muestran unas 400 obras de arte nacional y son importantes también las donaciones que han recibido de otros países, entre ellas las de España.
El edificio en sí es moderno, todo lleno de luz y de espacios amplios.
En la primera planta hay un banco de madera en el pasillo que se prolonga por todo el edificio y nos lleva a recorrer con la vista el trazo de la madera mostrando movimientos caprichosos.
Nace con la finalidad de mostrar el arte latinoamericano y nos muestra su dedicación a la educación y a la interrelación con otras materias de aprendizaje.
«La misión de Malba – Fundación Costantini, Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires, es coleccionar, conservar, estudiar y difundir el arte latinoamericano desde principios del siglo XX hasta la actualidad.
Sus objetivos principales son educar al público y despertar su interés por los creadores latinoamericanos; contribuir al conocimiento de las producciones culturales de América latina fomentando el reconocimiento de la diversidad cultural y artística de esta región; y compartir la responsabilidad de este esfuerzo con la comunidad nacional e internacional promoviendo el intercambio artístico entre instituciones nacionales, regionales e internacionales, y apoyando programas innovadores centrados en las artes visuales y en la cultura latinoamericana». (vía wikipedia)
Aquí podréis ver algunas de sus obras.
Es importante que este Museo se dedique a mostrar al público y concienciar del arte moderno, darle importancia a la creación personal de un autor que se expresa libremente y hacer entender a los más jóvenes y al público en general que eso es arte y que así debe concebirse y respetarse.
Durante todo el tiempo nos hemos acordado de Pedro porque él si valora este tipo de arte y le da la importancia necesaria, porque además él estuvo en Buenos Aires el año pasado y no tuvo tiempo de visitarlo.
Esta mañana nos hemos levantado tarde porque ayer estuvimos hasta media noche en el espectáculo del tango. Hemos ido directamente al Museo de Bellas Artes, por la tarde hemos visitado el cementerio y la iglesia de la Virgen del Pilar en el barrio de la Recoleta, hemos dado un paseo por las grandes tiendas de esta zona y nos hemos venido al hotel porque hacía mucho calor y ha caído una gran tormenta de verano.
Lo primero que hicimos fue entrar en el café Tortoni que fue fundado en 1858 y es uno de los cafés más antiguos que se conservan y en el que se reunían escritores y artistas a disfrutar de largas conversaciones.
Después nos fuimos al Museo Nacional de Bellas Artes donde pudimos comprobar que se albergan en él obras de autores importantes como Rembrandt, Rubens, Degas, Renoir, Cézanne, Morandi, El Greco, Rodin, Marc Chagall… No es muy grande, hay una planta que se encuentra en obras, pero es importante verlo de forma muy detenida por la importancia de sus obras.
Fuimos a comer a la pizzería Banchero, del año 1932, en el que se creó la fugazza de queso. Nos la recomendó Rubén, nuestro amigo chileno y verdaderamente las pizzas están buenísimas y el servicio es muy bueno.
Por la tarde hemos estado en el cementerio, en el que está la tumba de Eva Perón. Está bastante descuidado, a pesar de que allí se sigue enterrando gente, no hay flores, las calles muy pequeñas y como en cualquier otro cementerio, muchos gatos.
El resto de la tarde hemos estado por el barrio de Recoletas, viendo tiendas y algunas iglesias.
Día feriado en Buenos Aires, la gente no sabe muy bien a qué se debe esta fiesta, es el primer año que se celebra. Visitamos el Teatro Colón y por la noche fuimos a un espectáculo de tango, en el cual disfrutamos de un espectáculo puramente turístico, con cena, fotos…
El Teatro Colón de Buenos Aires está considerado uno de los mejores teatros del mundo. Reconocido por su acústica y por el valor artístico de su construcción, cumplió 100 años en 2008.
Las visitas son guiadas y tuvimos que esperar media hora para entrar, mientras tanto nos tomamos un café en la propia cafetería del teatro, disfrutando de la exposición de un artista local, Leonardo Raponi, sobre el carnaval de Venecia.
El teatro es una joya para disfrutar del caché en la que vivía la ciudad de los años de comienzo del siglo XX, se inauguró en 1908, tiene 4000 localidades, seis plantas, en el gallinero se está de pie y hay una parte para hombres y otra para mujeres, en la parte de platea existían unos palcos para viudas, totalmente enrejados para que no las viera nadie.
Me llamó la atención el detalle que comentó la guía sobre la araña, en ella pueden entrar seis personas y se baja una vez al año para limpiarla y reponer desperfectos.
Nos recuerda el Teatro de la Ópera de París y en menores dimensiones el teatro Lope de Vega de Sevilla, los tres son del mismo estilo, rococó y muy francés.La sala de recepción recuerda Versalles, conservan los muebles originales y algunos hasta con la misma tapicería. Las escaleras son grandiosas, sitio donde las bellas damas lucían sus atuendos, de marmol de Carrara y estuco para no hacer tan frías las estancias; los suelos son de mosaicos, hechos totalmente a mano.
Durante toda la visita nos hemos estado acordando de Edi, nuestra nuera, a ver si en algún momento la vemos actuar allí, aunque está más dedicado a Ópera y danza.
Por la noche fuimos a un espectáculo de Tango, con cena incluida, en el que vimos la variación que había sufrido este baile desde el principio del siglo XX hasta nuestros días. La música y los cantantes eran en directo, sonaban muy bien tanto música como cantantes.
Hoy hemos dejado Uruguay y hemos llegado a Buenos Aires. El vuelo ha sido cortísimo, una media hora. En el aeropuerto hemos pasado un sustillo, @jochimet perdió la maleta de mano y en ella iban los portátiles… pero no pasó nada, rebobinó en su mente y se dió cuenta que no la había recogido del control, al pasar por el escaner,pero el susto nos lo dimos. Al entrar me han dicho que debía dejar el mechero, menos mal que yo siempre llevo varios, solté el que estaba casi vacío, de los que me regala el estanco.
En el aeropuerto nos esperaba una chica de la agencia y nos ultimó todos los detalles, nos explicó qué no debíamos perdernos de Buenos Aires y con un tono extrañada nos preguntó cómo es que habíamos ido antes a Uruguay (hay rivalidad entre los dos países, es generalizado)
Nos metió miedo para que no nos confiáramos con las pertenencias de mano, demasiado, creo yo, pero mejor así porque si pasa algo ya estamos avisados.
Llegamos al hotel y deshicimos las maletas, aquí vamos a estar cinco días y así es más cómodo, yo no puedo estar sacando cosas de la maleta y no encontrando nada y además teniendo que dejarla abierta, para mí es un transtorno, así que lo hemos dejado todo en el armario bien colocado.
El hotel está detrás de la Plaza de Mayo, donde se colocan los jueves las madres del pañuelo blanco en reivindicación de sus hijos desaparecidos, hay otras muchas reivindicaciones que podréis ver después en la galería de fotos.
Hemos ido a almorzar al Palacio de la Papa frita que nos lo había recomendado Pedro, y, atendidos por Marcelo, hemos comido muy bien, un sitio muy curioso, con empaque y un personal excelente, me recordaba uno de París aunque el personal es mucho mejor, son simpáticos, eficientes, amables, muy profesionales …
Por la tarde hemos estado visitando la Casa Rosada que está en la misma Plaza de Mayo y donde la Presidenta hace las recepciones y trabaja con sus diferentes ministros.
Y ya el día no nos ha dado para más estamos muy cansados y mañana será otro día.
Se ve que Buenos Aires es una gran ciudad y, por ahora, la gente es también muy amable.