Saber y ganar

por comcinco

El mítico programa-concurso de la 2 cumple 10 años… y parece que por él no pasa el tiempo. No es que sea un ejemplo de modernidad, pero tiene fieles seguidores. Un ejemplo de televisión educativa, ¿demasiado elitista o tal vez los demás concursos ponen el listón muy bajo? Desde aquí un particular homenaje a este extraño formato y sobre todo a su presentador Jordi Hurtado (aka Pepe Sonrisas).

No podía dejar que este gran aniversario pasara desapercibido. Saber y Ganar cumple diez años, todo un logro para los programas-concurso de nuestra televisión. Allá por 1997 comenzó este juego de sabios, formato de Sergi Schaff, veterano realizador, y de la mano de Jordi Hurtado, ese hombre que lleva las mismas gafas desde hace una década.

Sé que este artículo puede parecer friki para algunos, pero me confieso seguidora de este programa. No es que me mantenga en la actualidad como una habitual espectadora, pero no me lo perdía ni una sobremesa cuando iba al instituto y a la universidad, por supuesto me acompañaban mi hermana y mis padres. Aunque en realidad, durante algún tiempo no dejamos de compararlo con Cifras y Letras, otro concurso, anterior al homenajeado, donde Elisenda Roca ponía a prueba la rapidez mental con las matemáticas y la riqueza verbal.

Lo sorprendente del concurso en cuestión es la conservación de los elementos que lo componen, incluidos los seres humanos. Una escenografía que habrá cambiado unas dos veces en todo este tiempo (el otro día me preguntaba si era real o era un croma), unos regalos… de los que hablaremos más adelante y unos presentadores…por no hablar del arcaico método de escribir al programa (con puño y letra, a un apartado de correos…)

El gran conductor, Jordi Hurtado, comenzó en el mundo del doblaje (fue la voz de Epi, de Barrio Sésamo. Repasad vuestra memoria auditiva y vereis qué escalofríos), pasó por la radio y fue a parar a los programas-concurso. El gran salto y la experiencia la tomó de Si lo sé no vengo (1985-1988) casualmente también del realizador Schaff. Aporta una gran personalidad al programa, ya que es un hombre anclado en la etapa de principios de los noventa, tiene un estilo propio y modula en exceso su voz. A veces llega a imitar acentos en función del tema a tratar, lo más vergonzoso en cuando pregunta sobre China o Japón: «Lafael, ¿plepalado pala la plegunta?» (ahí era cuando en mi casa cada uno miraba para un lado). Pero es admirable que Jordi siga intentando teñir de emoción momentos en los que la parsimonia se apodera de los concursantes. Quizá por eso el ahínco en denominar las fases del juego: el reto, la calculadora humana…

Juanjo Cardenal, la voz. Es la persona que realiza las preguntas (siempre en off), una voz muy característica que también participaba en Si lo sé no vengo. Su relación con Jordi es bastante ambigua, existe la broma de que Juanjo tiene muchos años y siempre que pueden aprovechan para decir que estuvo presente en acontecimientos históricos (de lo más desternillante…). También a veces juegan a echarse piropos y el presentador no deja de adular a Cardenal, haciendo sentir muy incómodos a los concursantes. (En esos momentos en mi casa solíamos ir al baño, recoger la mesa y lavarnos los dientes). En los diez años de trayectoria la voz se ha mantenido en la incógnita, nunca habíamos puesto cara al gran genio Cardenal. Pero hace unos días por fin se mostró ante las cámaras! (sin duda uno de los momentos más emocionantes, un buen regalo de aniversario!)

La azafata Pilar. Una azafata que ronda los cincuenta años. Intuyo que esta mujer es la esposa de alguien del equipo porque es antinatural y trabaja sólo 2 minutos al día.

Los regalos. La editorial Planeta patrocina un apartado del concurso: si el participante acierta una pregunta es obsequiado con un magnífico regalo. Parece que la editorial larga al programa de La 2 todo lo que no vende por teléfono ni en los quioscos, porque ha habido concursantes que han ganado una colección de relojes de bolsillo, una cruz isabelina, una réplica de un cuadro de Sorolla (eso está bien, pero podrían obviar el marco con ribetes dorados?)…de acuerdo con que no todo sea dinero…pero hasta hace poco consideraban que un equipo de sonido con compact disc era un regalo de categoría!

Singular o desfasado, sea como sea Saber y Ganar sigue en la parrilla de programación (de La 2, claro). No sé a qué será debido, pero de lo que estoy segura es de que aprendo cosas cada vez que lo veo (aunque muchas de sus preguntas sean imposibles de contestar!).

Para la despedida un vídeo del desaparecido programa Yo soy el que más sabe de televisión del mundo (qué pena que su presentador no desaparezca también) donde hablan de nuestro programa de sobremesa. (Nota: algunas opiniones pueden herir la sensibilidad del espectador).