El libro de Toni Solano, Aula o Jaula, editado por La Esfera de los libros (2023) y prologado por Nando López, es un excelente ensayo para la reflexión y el debate de los docentes que estén pensando que otra educación es posible. La escuela está viviendo tiempos convulsos y estas reflexiones de un profesor vocacional y a pie de aula nos pueden ayudar en el proceso.
¿Son las aulas actuales tan terroríficas como las pintan algunos?
¿La educación es peor ahora que antes?
¿El profesorado cuenta con la formación adecuada?
¿Es la Escuela un edificio a punto de derrumbarse?
A estas y otras preguntas nos responde el autor de este ensayo, Toni Solano, desde una visión práctica ya que desde hace más de una veintena de años se encuentra en las aulas, en diferentes etapas, intentando hacer de la educación un verdadero camino de progreso hacia la democracia de la ciudadanía. No son recetas cerradas, más bien son reflexiones que nos pueden ayudar a seguir trabajando en educación en la búsqueda del verdadero camino que ayude al alumnado en proceso de formación.
A lo largo de la obra el autor insiste que una bajada de ratio sería un principio perfecto para la mejora en la atención al alumnado y sus familias.
Cuando lees un libro y te identificas con él, parece como si estuvieses tú misma reflexionando en voz alta. Es un verdadero deleite que alguien se identifique con sus lectores hasta el punto que parece como si tus pensamientos han sido ya expresados por Toni Solano. Me identifico con sus reflexiones y os aseguro que leerlo ha sido un verdadero ejercicio mental positivo.
Toni Solano trabaja en un centro calificado de “difícil desempeño”, es decir, su tarea no es fácil, los problemas le llueven a mansalva y si además no hay un apoyo suficiente de la Administración, es difícil la tarea de cada día en la lucha por hacer una educación diferente, esa que quiere formar una ciudadanía democrática en la que se tenga en cuenta la diversidad de personas y en la que el contexto vaya mejorando a través de las acciones educativas del profesorado y el alumnado.
Nos recuerda Nando López en el Prólogo que nuestra labor como docentes consiste en ofrecer al alumnado los instrumentos necesarios para que puedan construir su voz y cimentar su futuro, permitiéndoles ser quienes aspiran y trabajando día a día para que los centros escolares sean lugares seguros a salvo de la violencia –racista, machista, homotransfóbica, capacitista o de cualquier otra índole– que, por desgracia, sigue viva fuera de esos muros.
A lo largo de la obra podemos ver la lucha de Toni Solano a favor de la inclusión, respetando las diferencias y podemos verlo alentando al profesorado para que asuma una sociedad diversa y plural en la que las diferencias son enriquecedoras y en ningún momento pueden frenar el proceso de formación del alumnado. Es necesario trabajar en este sentido con toda la comunidad ya que las familias y el propio contexto son elementos influyentes en este tipo de formación en la que la premisa definitoria sea la justicia social y el respeto a los derechos humanos.
En el libro no vamos a encontrar recetas que puedan resolver las cuestiones que nos vamos encontrando en el proceso educativo en los centros. Vamos a encontrar reflexiones que nos pueden ayudar para escoger el camino por el que la educación no sea un lastre para sus usuarios, ni un sufrimiento continuo para el profesorado.
Nos resume Nando López que en este libro se habla de reformas y mejoras necesarias que aún no llegan. De reivindicaciones justas. de la importancia de trabajar en equipo. De la necesidad de una escucha activa. De la colaboración entre centros y familias. O de la urgencia de romper mitos y prejuicios para acabar con visiones catastrofistas que vaticinan futuros apocalípticos y olvidan datos tan contundentes –y esperanzadores– como que los mayores índices de lectura se hallan en la población entre ocho y dieciséis años. O como el hecho de que la mirada de nuestra adolescencia es cada día más consciente y crítica en temas tan importantes como el feminismo, la visibilidad LGTBI+, la lucha contra el racismo o la ecología.
La tarea docente necesita de personas que crean en una educación distinta que no sea pura instrucción, enseñar en una actividad integral que va más allá de dar conocimientos, una tarea que luche por mejorar a la ciudadanía que ya está inmersa en esta sociedad con la cual nos enfrentamos a problemas que hacen saltar por los aires los Derechos Humanos.
En definitiva, un libro muy completo que nos hace reflexionar en la educación y va dando pistas de otra posible organización; puede ser útil para estudiantes de Grado, para el profesorado que está empezando, para los docentes que ya llevan un tiempo ejerciendo y para todas aquellas personas que piensen que la educación puede mejorar la sociedad en la que vivimos.
Puedes ver la reseña completa en El Diario de la Educación, publicada el día 6 de octubre de 2023