Sinopsis de la editorial
Prácticamente «todo el mundo» afirma rotundamente que la Educación es muy importante y quizás sea por eso por lo que los gobernantes quieren hacerse con ella. Pero ¿esa «Educación» es la verdadera, la que ayuda a cada persona a alcanzar su propia plenitud personal y a que impere la auténtica libertad, igualdad y fraternidad?
El autor recorre situaciones, conceptos, principios y buenas, o no tan buenas, prácticas educativas y escolares y nos va llevando a grandes reflexiones para que podamos llevarlas al ejercicio de nuestra práctica.
Nos plantea en todo momento la diferencia entre lo educativo y la enseñanza como dos realidades inseparables pero diferentes.
A lo largo de las páginas, salpicadas de numerosos hechos reales vividos en primera persona por el autor, se presenta el hecho educativo como algo de enorme trascendencia en la vida con el que se deben detectar, tener en cuenta y satisfacer las necesidades educativas personales.
Presenta un horizonte alejado de todo colectivismo e individualismo, que considera profundamente despersonalizadores y auténticos problemas del cuerpo social.
Su larga trayectoria en el mundo educativo hace que las numerosas afirmaciones, prácticas, anécdotas… que cuenta sean muy reales, creibles y eficaces para que se reflexione sobre ellas. «Defensor a ultranza de la Educación Personalizada. Aunque cree que estamos asistiendo a un nuevo renacimiento que sitúa a la persona humana en el centro de todo, subraya que queda mucho por hacer para lograr que el ser humano no esté al servicio de los sistemas y las instituciones sino que estas y aquellos estén al servicio de cada hombre y mujer concretos»
Subraya que «para educar, en el sentido más profundo y noble de la palabra, es necesario que educadores y educandos tengan muy claros los objetivos que pretenden y que la actividad se desarrolle desde la libertad, en libertad y para la libertad. Acaba proponiendo al educador que actúe de forma que los hijos o alumnos deseen imitarlo»
Apreciaciones personales
A pesar de las continuas referencias religiosas, cuestión que el autor en ningún momento esconde, dado su compromiso dentro del cristianismo y que a algunas personas pueden chocar, me parece un libro lleno de enseñanzas que pueden servir en la reflexión y práctica de los docentes y en general de aquellas personas preocupadas por la educación.
Tengo que decir que he disfrutado leyendo hasta la última página y eso que su lectura me ha cogido en medio de un viaje en el que mucho había que ver y que me quitaba tiempo de mi horario habitual de lectura. Recuerdo una noche en la que en el salón del hotel estaba leyendo y de fondo tenía la típica animación del Imserso en la que la gente baila al ritmo de las canciones de siempre, cuando me di cuenta mi marido estaba riéndose con mis hijos, por mensajería telefónica, de lo absorta que yo estaba leyendo, pasando olímpicamente de lo que para otros era un disfrute de cante y baile.
Aprecio muy positivamente que haga la distinción entre «Educación» y «Enseñanza» ya que personalmente es una tarea que, en mi también larga etapa docente, me he encargado de diferenciar. Sobre todo en secundaria se confunden los términos y hay parte de los docentes que piensan que ellos deben dedicarse a enseñar porque la tarea educativa debe estar en las familias. Queda claro y evidente que la ESO es Educación Secundaria Obligatoria y que por tanto la tarea educativa debe entrar de lleno en la labor del profesorado.
Relata con facilidad situaciones autobiográficas que te van conectando con tus propias reflexiones. Una de las cuestiones que creo que me llevan a apreciar lo que he leído es quizás la coincidencia en el tiempo de estudiante con el propio autor, esta circunstancia me ha hecho como que leía mi propia historia de estudiante y principios de docente, esto me ha hecho conectar con la lectura y llevar a mis propias reflexiones, en muchos casos coincidentes con el que escribe, es sentir que alguien parece que está escribiendo tu propia biografía, quitando connotaciones religiosas que hay que saber discernir y que en ningún momento tienen por qué alterar las enseñanzas que se desprenden.
«En la diversidad está la riqueza; «homogeneizar» seres humanos es atentar contra la dignidad personal. ¡No nos dejemos!» Esta reflexión me lleva a pensar en mi tarea docente y en lo que siempre me tocaba defender. Cuando realizaba mi tarea de directora, con frecuencia, decía «detrás de un alumno problemático, casi siempre hay un problema familiar, no en todos los casos, como podemos leer en «Mal de Escuela» de Pennac. Escuchando el problema que hubiese ocurrido en la clase se me ponía en mente todo lo que esa familia concreta estaba pasando, cuando me quedaba a solas con el profesor o profesora y le contaba la situación familiar, la cuestión cambiaba mucho, se explicaban algunos comportamientos, en la mayoría de los casos como llamadas de atención, como petición de auxilio y de cariño de los que los adolescentes están tan necesitados.
El propio autor en el Magazine INED21 nos relata «En una reciente entrevista me preguntaban: ¿Para qué se educa? ¿Cuál es el fin último de la educación? Contesté a las dos preguntas aportando mi definición de educación: “Ayudar a cada ser humano a establecer y mantener vínculos valiosos con la realidad, especialmente con las personas”.
Su defensa de la Educación Personalizada no debemos confundirla con la enseñanza individualizada ya que ignoraríamos la dimensión social de la persona, no se puede ser persona en solitario. «La educación personalizada atiende a lo que las personas tienen en común, y lo que tienen de propio; aúna las exigencia de la individualización y socialización educativas, y constituye el tipo de educación más acorde con las profundas necesidades humanas y las condiciones del hombre en la sociedad tecnificada en que vivimos; estimula a cada sujeto para que vaya perfeccionando libre y responsablemente la capacidad de dirigir su propia vida; proporciona una formación integral, capaz de poner unidad en todos los aspectos de la vida de cada ser humano; propugna la participación de profesores, alumnos y padres en todo lo que es y supone la vida de la institución educativa; se ajusta a la existencia de valores universales y objetivos, acordes con el bien, la verdad, la belleza; se ocupa de formar en alumnos, profesores y padres el espíritu crítico frente a toda la información que reciben, para que sepan discernir la verdad del error, única forma de evitar la manipulación de las ideas». (rep nº 252. Calderero y otros)
En definitiva, el libro es recomendable para todas aquellas personas que están preocupadas por la educación de los niños y niñas, sean docentes o no, salvando las continuas citas y ejemplos religiosos a los que nos hace referencia.
Gracias por su cordial comentario. Ha sido un verdadero placer leer el libro. Saludos.
[…] eso es una gozada. Personalmente me pasó con un libro de José Fernando Calderero “Educar no es domesticar” y con otros muchos que parece que están escritos con mis ideas y eso te hace emocionarte, […]
[…] Educar no es domesticar de José Fernando Calderero. Portada y reseña. en sus páginas muestro varias experiencias muy relevantes experimentadas en …@irabia_izaga y que me “marcaron” muy […]
[…] no es domesticar de José Fernando Calderero. Portada y reseña. en sus páginas muestro varias experiencias muy relevantes experimentadas en “…irabia_izaga y que me “marcaron” muy […]
[…] no es domesticar de José Fernando Calderero. Portada y reseña. en sus páginas muestro varias experiencias muy relevantes experimentadas en “…irabia_izaga y que me “marcaron” muy […]
Muchísimas gracias, Dolores Álvarez.
Sólo por leer estos comentarios tuyos ya hubiera merecido la pena escribirlo.
Mi objetivo, como has detectado perfectamente, es ayudar a difundir una visión de la educación que ayude a todas las personas en su desarrollo personal hacia su propia plenitud, en sentido amplio y desde cualquier posición intelectual o vital.
Un saludo MUY CORDIAL y, de nuevo, MUCHAS GRACIAS.
Creo que te gustará: http://www.unir.net/research/revista/noticias/investigacion-vs-mistica/549201676761/
Me encantaría que pudieras asistir online (has de inscribirte previamente de forma gratuita) a http://masterclass.unir.net/openclass/desarrollo-del-pensamiento-critico-necesidad-humana-esencial.html