Un nuevo dÃa en Beijing. Puede ser un dÃa muy largo o un dÃa demasiado corto. Depende como se mira es bueno o malo. En nuestro caso, será un dÃa corto pero debido al cansancio de los vuelos. Más taxis, competición, ciclismo, ciclistas, chinos pero sobre todo militares, muchos militares.
Hoy es sábado 6 de septiembre. Nos despertamos temprano. Hoy compite Antonio GarcÃa y los compañeros. Está lloviendo un poco, mejor, asà se refresca un poco el ambiente y deja de hacer ese bochorno casi insoportable. Hoy cogemos dos taxis desde el mismo hotel, los pedimos en recepción. Nos repartimos en los taxis, esta vez no habÃa miedo de perderse porque no era una inauguración y porque un velódromo no puede ser tan grande como para tener varios accesos.
Cuando llegamos allÃ, después de que el taxista tuviera que pararse a preguntar como se llegaba, vi lo que podrÃa ser el escenario de la tercera parte de Men in Black (solo se entiende si habeis visto la primera).
Lo gracioso de esto es que fuimos al velódromo sin tener las entradas compradas… Vamos a taquilla, no hay, mmm, bueno de reventa, nos van a salir más caras. Aunque teniendo en cuenta el cambio de moneda comentario anteriormente, que la entrada más cara en reventa nos costara sesenta yuanes no es problema. En taquilla cuesta treinta. Bueno, después de parar a veinte mil chinos y extanjeros conseguimos hacernos con las 6 entradas que necesitabamos, hay que decir que algunos chinos nos dieron la entrada de gratis, que majos son. Ya de paso compramos en taquilla las del dÃa siguiente.
Lo primero que choca al entrar en el recinto es ver la cantidad de voluntarios que hay dandote todos y cada uno de ellos los buenos dÃas, la bienvenida y que disfrutes de los juegos. Siempre con una sonrisa en la cara y agitando las manos al mas puro estilo chinorri/japo (con amor). Al entrar al velódromo ooohh!!.
Nos colocamos en lo que en un campo de fútbol serÃa un gol. No habÃa nadie y habÃa una vista perfecta de toda la pista. Plantamos las banderas que traÃamos, una andaluza, una de Mairena del Alcor y tres españolas. Animamos como cosacos, gritando, silbando, aplaudiendo a todos los equipos, pero sobre todo a los españoles, ¡¡como tiene que ser!!.
Antonio GarcÃa calentando
Un buen rato antes de que le tocara salir a competir a Antonio vino a donde estabamos nosotros. Nos dijo que no iba a hacer mucho, que salÃa para comprobar como estaba la pista y para coger práctica para su próxima carrera… Quedó el 10º… HacÃa ya rato que se habÃa unido a nuestro grupo un entrenador español y una familia del PaÃs Vasco que también tienen familiares corriendo en ciclismo de pista. Asà que tenÃamos allà la ikurriña, la andaluza, la española y la de Mairena del Alcor.
Amador y Antonio, dos campeones
Bueno, el caso es que estabamos allà animando cuando se presenta un voluntario de la orgranización más nervioso que un flan, hablando en inglés, diciéndonos que por favor nos sentaramos y que dejaramos de chillar porque estabamos perturbando las carreras y a los corredores… Nos quedamos de piedra y nos cortaron el punto la verdad. Nos callamos y solo animamos a los españoles pero sin tanta efusividad y la verdad, vaya muermo de público. Estan como viendo un partido de tenis… Hay que gritar, pasarle tu fuerza al corredor para que pueda cogerlo y dar el último tirón… de eso se trata ¿no?.
Al salir me hice esta foto donde se me ve la cara de cansancio que estoy acumulando. ¡¡Vaya ojeras chaval!!.
Como llevábamos todo el dÃa dentro del velódromo no nos dimos cuenta que dejó de llover. Al salir estaba nublado pero la verdad parecÃa que no iba a llover más. Y la verdad es que no llovió más. Llegamos al hotel y nos acostamos a eso de las ocho de la tarde más cansaos que una mula, a eso de las 5 de la mañana escuché como un murmullo, un bbrrrrr!!!, luego un flash que me hizo abrir los ojos, el silencio y de nuevo el bbrrrr!!!, una tormenta eléctrica impresionante. La más grande que he visto nunca. Los rayos estaban justo encima de nuestra zona y eran extremadamente luminosos. El ruido era aconjonante. Estando en una planta 21 en Beijing la verdad es que me entró un poco de acojone. ¡¡Buff!!.
Panorámica desde la ventana del hotel antes de la tormenta
Más fotos en mi Flickr
Juan, cuando hables de yuanes tienes que compararlos con los euros para hacernos una idea de lo que os cuestan las cosas.
Sacar fotos del grupo y las banderas.
A mi me va a callar un chinorri hablando inglés por los cojones!!! Como no venga con metralleta y con Chuck Norris escoltandole no me callo por mis santos cojones!!
Por cierto socio dejate de tormentas electricas q nos tienes en casa cagaos.. La próxima vez di q hizo un dia estupendo y te bajas algun video de marra del llutuve…plis
Por cierto pal comentario de arriba: 1€ = 10 yuanes, aprox.
Saludos occidentales.