5 días

por abrelatas

– Uno.
– Pasa a la siguiente imagen.
– Voy.
– ¿Ese es el primer vídeo subido a YouTube?
– Es ridículo, ¿verdad?
– Totalmente. Pasa a la siguiente… ¿qué es eso?
– Un e-mail que me enviaste al principio.

El espectador es el más intransigente manipulador discursivo existente.

– Pedante.
– Yo prefiero abrir nuevos caminos narrativos.
– Yo prefiero llegar a más gente.
– Por eso tú trabajas en un gran medio de comunicación.
– Por eso tú tienes problemas para llegar a fin de mes.
– Protesto.
– Admitido.
– Pasa a la siguiente.

– Deténgase.
– Lo siento, pero no llevo nada de metal. Me he cerciorado que al pasar el control no llevo nada que pueda pitar. De hecho, no uso cinturones por eso mismo. Porque me toca las narices tener que desnudarme cada vez que paso un control. ¿Me puede decir por qué he pitado?
– Aleatorio.
– ¿Qué quiere decir con aleatorio?
– Quiere decir que la máquina suena cada cierto tiempo para que aleatoriamente realicemos la inspección de una persona.
– O sea, que ya no es suficiente conque nos traten como potenciales delincuentes, conque nos abran el portatil y nos pregunten qué sistema operativo usamos, que nos hagan descalzarnos, que nos cacheen en busca de bombas invisibles, que nos confisquen chucherías, que nos hagan pagar agua a precio de gasolina…ahora resulta que si encima nos tomamos la molestia de pasar este trance de forma más efectiva, aún existe la posibilidad de que aleatoriamente la máquina suene, me detengan y me registren…
– Deleuze.

– Estoy enfadado.
– ¿Por qué?
– Vale que no te guste el fútbol. Que sea el opio del pueblo y que promueva unos valores de mierda. Vale que su cuota de pantalla con respecto al cine iraní es dictatorial…
– Protesto.
– Admitido…Todo eso lo entiendo. Y entiendo más aún que no puedas comprender cómo puede pretenderse reflexionar sobre la democracia al mismo tiempo que se celebra goles del Real Madrid. Pero que propongas como alternativa un encuentro entre Obama y Zuckerberg en Facebook me parece lamentable.
– Protesto.
– Adimitido…No es lamentable. Pero es un poco raro. Es decir, es como si te acercaras a un grupo de niños que están a punto de entrar al McDonalds y les dijeras: “No sabéis lo que hacéis…no os dejéis seducir por la retórica de la hamburguesa…id a los 100 Montaditos”.
– Igual querrías que le dijera a esos niños que cultiven su propia comida ecológica.
– Protesto.
– Admitido. Pero reconocerás que es detestable y vomitivo el vasallaje mediático al que nos somete el fútbol y en especial los dichosos “clásicos” del siglo.
– Lo reconozco, pero reconoce tú que proponer como alternativa de consumo un encuentro entre Zuckerberg y Obama no es que sea el mejor de los contra-ejemplos.
– Es que trabajo en un gran medio de comunicación.
– Y yo leo a Deleuze, no te jode.

– Los momentos en los que tengo que hacer cosas pienso en las cosas que no suelo hacer y me gustaría…
– Y los momentos en los que no tienes nada que hacer piensas en las cosas que tienes que hacer y no te pones con las que te gustaría hacer…
– ¡Exacto!
– Vé al psicólogo.
– Joder, qué dureza.
– Si esto fuera un cortometraje de los 90 o una telenovela sacaría una pistola, te la metería en la boca y te diría de nuevo: “Vé al psicólogo”.
– Y si esto fuera una peli de Jackie Chang, te cogería del brazo, darías una vuelta de campana sobre tí mismo y caerías al suelo, inmovilizado y, por supuesto, con ningún hueso roto. Fuerza precisa en punto preciso.
– Para poder hacer de doble en la siguiente escena.
– Eso es.
– ¿Qué día es?

– Digital y analógico quizás no representen realidades opuestas.
– ¿En qué sentido?
– Digital viene del latín, de dedo. A su vez, los dígitos fueron establecidos porque necesitábamos contar el mundo. Y nuestro “sistema decimal” contempla hasta 10 unidades. Porque teníamos 10 dedos.
– ¿Y qué significa analógico?
– Pues existe un debate sobre ello. Hay quienes piensan que en los años 70′s, ante el desarrollo explosivo de la electrónica digital que dió origen a los microprocesadores, se comenzó a utilizar el término “analógico” como un antónimo de la palabra “lógico”, éste último para referirse a la reciente y prometedora ciencia de los ’1′s y los ’0′s. En cambio hay quiénes creen que comparte raíz con la palabra “analogía”. En ese caso, estaría compuesto por “aná”, que suele significar según el contexto “sobre” o “contra”, por “logo”, que significa palabra, razón o argumentación y por el sufijo “iá”, que significa cualidad. Lo curioso, es que hay quién considera que “aná” significa “Hacia atrás, siguiendo el mismo camino” en el caso de la palabra “analogía”, que se refiere a elementos similares encontrados en cosas diferentes.
– Un momento, sácame esa pistola de la boca.
– Pasa a la siguiente imagen.
– Aleatorio.
– Protesto.
– Los momentos en los que tengo que hacer cosas pienso en las cosas que no suelo hacer y me gustaría…
– ¿Qué día es?
– Cinco.