Bajo una sombrilla nació este libro y es ahí, haciendo honor a su nacimiento, donde me he leído la mayoría de sus páginas, son circunstancias veraniegas que ayudan a estar más tiempo con la familia y a recibir toda la riqueza que tengo la suerte de disfrutar en la compañía de mi nieto y mis nietas.
Emma, de seis años, me dijo una tarde muy enfadada: Venga abuela, que ya has leído mucho tiempo y además estás pintando el libro, vente a bañarte…
Lola, de doce años, ayer por la tarde cuando terminé el libro y respiré profunda, ante mi «lo terminé», me preguntó si me había gustado, le dije que sí que me había gustado mucho pero que había circunstancias que me resultaban incómodas: tiene la letra demasiado pequeña, el formato está bien para leerlo en mesa pero no para leerlo en la mano… Acostumbrada a la lectura en formato digital, que ese sí atiende a la diversidad, no puedo entender que en este siglo y año en el que estamos no se saque el libro en formato digital, ¿los intereses económicos priman?…
Sinopsis: Quince reflexiones sobre la aportación docente a la orientación del alumno hacia su singular proyecto de vida. Este libro es una obra coral de un grupo de docentes en ejercicio que piensan y sienten la educación como una acción transformadora en el plano social, comunitario y también personal. Sus reflexiones animan al lector a entender la educación como un esfuerzo por escuchar y actuar. Para ellos el papel del docente es cada vez menos el de enseñar y más el de sostener un adecuado proceso y marco dentro del que el alumnado encuentre las mejores condiciones para su aprendizaje. El reto de una educación para ser empieza por la transformación del educador con el fin de saber acompañar en el desarrollo de un sentido, de un propósito profundo del ser humano, para una vida plena, compartida desde la identidad, los valores y los talentos propios. (SM, 2020. Biblioteca de Innovación Educativa)
José Blas García es licenciado en Psicopedagogía y Diplomado en profesorado de EGB por la Universidad de Murcia. Máster en Educación y Comunicación por la UNIA. Trabaja como profesor de Matemáticas en un IES de Murcia y como Profesor Asociado al Departamento de Organización Escolar en la Facultad de Educación de Murcia.
Francisco Riquelme es Licenciado en Bellas Artes por la UPV, Máster en Arteterapia por la UMU, Formación Gestalt ProgramaSAT, coach Certificado ICF y ASESCO. Trabaja como Jefe de Estudios en el CEA de Torre Pacheco. Es también formador en bienestar docente, gestión emocional, coaching educativo, creatividad, aprendizaje cooperativo, aprendizaje basado en proyectos y aprendizaje servicio.
Pues sí, Lola, el libro me ha gustado por muchas razones, entre ellas: la mayoría de los autores y las autoras, son amigos y amigas, eso me hace tener una afinidad de ideas con sus planteamientos, es fácil leer lo que piensas y compartes con muchas otras personas dedicadas a la educación, no tienes que poner al cerebro en disposición de sacar argumentaciones para rebatir lo contrario; en el libro se habla de educación, de educación para el ser, para la persona en su integridad, de forma personalizada, atendiendo a la inclusión y por tanto a la diversidad de niños y niñas que nos encontramos en nuestras aulas; sé que todas las personas que lo han escrito están trabajando en las aulas o en formación del profesorado, con lo cual no son «guruses» que hablan de lo que no experimentan, son personas comprometidas con el acto de educar a los estudiantes en su integridad y sin despreciar a nadie, una constante que podemos ver a lo largo de toda la obra; son autores y autoras que están presentes en las redes y con los cuales podemos compartir pensamientos y trabajos; es un libro donde se abordan muchos temas de educación con el objetivo común de educar a las personas como tales, sin carreras de obstáculos que impidan que algunos se queden rezagados y con cicatrices para toda su vida; en él se ve que los autores y autoras propugnan una transformación en la escuela desde sus raíces más profundas, las personas que son las que verdaderamente son las protagonistas del hecho de aprendizaje y educación; es un libro serio, contundente,para analizar en profundidad, comprometido con el alumnado y con el profesorado, es un libro donde se dan pautas de cambio para esa transformación que queremos de la escuela; además tiene unos buenos esquemas ilustrados que te plasman las ideas claves de cada capítulo con mucho ingenio; te enriquece la bibliografía que dan los autores y autoras y las conclusiones finales de cada capítulo, todo esto es de agradecer … para que tú, Lola y tus amigas, tengáis lo que os pertenece, una educación que os pueda servir para vuestro desarrollo integral personal a lo largo de toda la vida y donde el profesorado os escuche y acompañe en busca de todo ese conocimiento y vivencias que os van a hacer buenas personas, comprometidas con vuestro entorno y con vuestra realidad más cercana, aportando vuestros propios pensamientos.
Por todo lo anterior puedo decir que el libro ha sido un disfrute y que se lo recomiendo al profesorado y agentes sociales preocupados por una educación de calidad en la que se atiendan a las personas en su integridad y con la cual dejemos huellas y no cicatrices.
«Educar para ser es plantear que la educación no debe ser solo cuna del conocimiento, sino también de la cultura viva que transforma la sociedad» José Blas García.
«Una educación para ser solo puede ser posible desde la construcción de un necesario vínculo a través de una presencia docente que encarne la resonancia del ser» Francisco Riquelme
[…] Este artículo fue publicado originalmente en el blog de la autora el día 30 de julio de 2020. Puede verlo en este enlace […]