Que no, señores, que no se puede llevar a cabo esta medida que ustedes proponen «Aumentar la ratio y bajar el cupo (número de profesores y profesoras por centro) que esto perjudica seriamente la salud del profesorado, la del alumnado y la de los centros en general… Quien ha pensado en esta medida no se ha puesto delante de una clase, a puerta cerrada, con el alumnado de los niveles de Primaria y Secundaria, de lo contrario habría recordado que aumentar la ratio es gravemente perjudicial para la educación porque, con respecto al alumnado:
1. Aumentan las personas a atender, por tanto aumentará el tiempo que cada profesor o profesora necesitará para educar, casi que se verá obligado a instruir.
2. Aumentará el nivel de ruído en las clases, por tanto también aumentará el nivel de estrés del profesorado, llegará el momento que aumentarán las visitas al médico y como consecuencia las bajas por agotamiento y el alumnado quedará sin atención alguna.
3. Aumentará el nivel de instrucción, que es lo más fácil en estos casos de ratio elevada, por tanto bajará el nivel de comprensividad y de formación de ciudadanos críticos.
4. Aumentará la conflictividad en los grupos clases porque el espacio físico también se verá constreñido, por tanto el alumnado se verá perjudicado en uno de los principios básicos para una buena educación, el tamaño de los espacios cuenta.
5. Aumentará el tratamiento impersonal, las clases puramente de transmisión de conocimientos, por tanto formaremos a una ciudadanía con opiniones vagas sobre su futuro y el de la sociedad en general.
Quien ha pensado en la medida de reducir el número de profesores y profesoras por centro no ha pensado con respecto al profesorado que:
1. Hay que atender a la diversidad, procurar la integración y la inclusión, por tanto hace falta que el número de profesores y profesoras por grupo se desdoble.
2. Hay que motivar al alumnado para que esté atento en las clases y esto conlleva medidas de atención personalizadas, por tanto hará falta que se den conjunciones entre el profesorado de apoyo, el tutor, el orientador… no podemos eliminar ninguna de estas figuras en los centros.
3. Hay que pensar que el profesorado necesitaría mucho más tiempo para corregir tareas, exámenes, trabajos… y si además se le aumentan las horas lectivas… tendrá que tirar de su horario personal y esto conllevaría una sobrecarga en su nivel de compromiso con el trabajo educativo.
4. Hay que pensar que el profesorado ante el aumento de la ratio y la bajada de cupo, puede posicionarse en lo que más cómodamente le puede ayudar en su trabajo, la tarea transmisora de conocimientos, así se olvidará de trabajos en grupo, de atención personalizada, de ordenadores, de PDI,…
5. Hay que pensar que el profesorado ante esta prespectiva dejará de formarse y de ponerse al día en técnicas educativas porque para lo que va a hacer no necesita de nada más, son las técnicas de «explicar, corregir y el que no lo haga bien suspendido queda»
Que NO, que esto no nos lleva a elevar la calidad de la educación en España, que vamos a retroceder a los años cincuenta y esto no nos lleva a elevar el nivel en las pruebas externas, de las cuales ustedes están tan preocupados.
Señores la educación en España va por muy buen camino, está avanzando, no la estropeen, no molesten más este sector e intenten ahorrar de gastos militares, recuperación de débitos de grandes entidades…
Tienes toda la razón, pero les va a dar igual. El viernes será ley. Y encima argumenta con la socialización. (Wert) Lo tenemos crudo.
Gracias Manolo por el comentario, espero que en Andalucía esta medida no se lleve a cabo. Cuando yo empecé a trabajar teníamos 40 en las clases y eso era distinto, allí se transmitían conocimientos y el que no lo cogía… no se hablaba de integración, ni mucho menos de inclusión, ni de diversidad, ni de tratamiento personalizado… eran números, no personas… si te ibas a la 2ª etapa en la que dabas varias materias a varios grupos… eso era de locura, terminabas sin enterarte cómo eran las personas a las que estabas intentando «educar»… por nada del mundo debemos volver a eso… sería retroceder muchos años y la Educación no se lo merece. Un saludo.
Gracias Engracia por el comentario. lo de argumentar con la socialización me tiene totalmente indignada porque además, ese señor es sociólogo… ¿qué pretende jugando con nosotros? Un saludo
Totalmente de acuerdo; ¿cuántas veces, Loly, hemos escuchado decir ante las intenciones de la Administración que esas ideas venían de personas que no conocían la realidad de las aulas? A veces ese era el único recurso del inmovilismo, pero esta vez -como tu bien dices al principio- «Quien ha pensado en esta medida no se ha puesto delante de una clase, a puerta cerrada, con el alumnado de los niveles de Primaria y Secundaria». Tan cierto como el batacazo que se nos viene encima… Saludos, maestra.