Precisamente allá por 1984 Loquillo y los Trogloditas preguntaban dónde estabas tú en el 77. Sonido de otra época que, desde que Zemos98 me emplazó a hacer este review, grita en mi mente y sale por mis labio en forma de tÃmidos susurros. «A los 15 eras joven y a los 20 ya mayor», decÃa Loquillo producto del chapurreo lÃrico de Sabino Méndez, remontándose a un desorden de cosas, a una forma de enfrentarse al mundo, a un espÃritu del que, en los 90, casi nada quedaba…
En primer lugar quiero pediros disculpas por el bajo ritmo de publicaciones en éste vuestro blog y la larga demora en la publicación de las tres partes del artÃculo sobre continentes y contenidos de cultura que este post interrumpe para quitar solemnidad y darle a Taburete un poquito de humanidad que también se la merece…
Pues bien 17 años tenÃa yo en 1998 y, lejos de empezar a ser mayor, todavÃa estaba empezando a ser pequeño. Producto de la generación X, terminaba el instituto y escuchaba las melancólicas melodÃas de Pearl Jam. Discos más tranquilos y sin ese sello de mitiquez del Ten o el Versus, el Vitalogy y el No Code acompañaban mis dÃas, además de los, por aquel entonces, recientemente disueltos Héroes del Silencio.
SeguÃa mediosaliendo con la medionovia que seguirÃa siendo mi novia y nonovia durante muchos años hasta hace bien poco, a la par que robaba mediomagreos a una compañera de instituto a escondidas del resto del mundo, todavÃa no sé bien por qué motivo, pero era gracioso y hasta emocionante…
La literatura existencial entraba en mi vida a través de, nada nuevo bajo el sol, La insoportable levedad del ser de Kundera y me sentÃa identificado con el ya clásico MartÃn Hache.
El 98 fue para mà un año de transición entre el manido pasado y un futuro que cuanto más próximo estaba a él, más borroso se volvÃa. Ante tanta incertidumbre, como harÃa el burro, la oveja o el entrañable cervatillo, mejor quedarse en casa haciendo lo que uno conoce. En pocos meses supe que una de las primeras decisiones importantes que habÃa tomado sobre mi vida, no la habÃa gestionado bien. Pero me tomé un año para pensar qué es lo que querÃa hacer y, la verdad, puede que no haya sido nada desastroso haber estado un año en empresariales desarrollando una extraordinaria habilidad para jugar al mus (que todavÃa conservo), comentando todos y cada uno de los culos y escotes que pasaban por delante de la mesa de la cafeterÃa y sin estudiar prácticamente nada más que las asignaturas de sociologÃa y estadÃstica.
TodavÃa hoy, y a mi manera, sigo pensando que tenÃa sentido que yo estudiase administración y dirección de empresas. Y sigo pensando, sin decÃrselo a nadie, que con este MBA que estoy haciendo en empresas e instituciones culturales estoy cerrando un cÃrculo que empezaba precisamente en ese año 1998.
Por lo tanto no vivà una revolución, no vivà una guerra, ni siquiera una mÃsera y descafeinada transición. Mi vida, desde el 98, es como la de todos los consentidos hijos del estado del bienestar y de los contratos indefinidos de nuestros papás, un tanto absurda y sin grandes sobresaltos. Una vida en la que, por mucho que me haya empeñado en complejizarla y buscarle sentido en estos 10 años, no tiene más relevancia que la de esos momentos, esos instantes, con esa gente que te ha acompañado, con la que te has reÃdo, con la que has llorado, con la que has hecho lo que realmente querÃas. Con el paso de esta minúscula cantidad de dÃas, semanas y meses que suponen una década cada dÃa tengo más claro que de poco valen las cosas que no valen la pena, personajes sin vida con los que me he topado, personas vacÃas y chupasangres, envidiosos y necios. El mundo es nuestro al fin.
P.D.: Por cierto, tras escribir todo esto me ponen en mi lugar y me indican que estoy describiendo 1999… En fin, el recuerdo ese gran traidor.P.D.2: Siento no poder mostraros fotos de mà y mi pelo largo en un scooter color violeta con flamantes llantas blancas, pero es que nunca le di importancia a estas cosas y no encuentro ninguna por aquÃ…
Me gusta verte nostálgico…
Pues sÃ, más que un Audi, lo que pasaba era que no sabÃa lo que querÃa.
Lo de pasarme por ahà empieza a ser la eterna posibilidad que nunca se concreta, pero en este momento estoy verdaderamente liado. Entre máster, prácticas, curro y alguna otra cosa dudo sacar tiempo para acercarme a Sevilla y a ver si consigo ir publicando cosillas en Taburete.
Pero bueno, me despierto por la mañana escuchando noticias de Zemos en Radio3 e intuyo que os va todo muy bien.
Un abrazo!
ñotex…poniénome nostálgico, fue una suerte conocer a roi. fue una suerte conocerte a ti. y es una suerte que compartas esto y como bien dices «humanices» el blog.
yo también he estado desaparecido, pero al menos por aquà en la casa ZEMOS98 voy a intentar dejarme ver más, qué menos.
Gracias por compartir con todos que en realidad lo único que querÃas era lo mismo que yo a las 17: un audi TT -producto de estudiar administración y direccion de empresas-
jajaja, eres un grande!
oye, a ver cuando cuentas más del MBA…y a todo esto, ¿te vienes al festival? ¿has visto lo de los talleres?