(En) plan lector (Plataforma, 2023) de Miguel Salas Díaz es una invitación a descubrir los beneficios de la lectura y cómo podemos entusiasmar a los adolescentes para que lo conviertan en hábito. Dirigido a docentes y familias este libro nos plantea estrategias para hacerles descubrir cómo con la lectura se aprende y te diviertes.
Un libro práctico, para docentes y familias, que nos da pautas para acompañar a los estudiantes en su proceso lector.¿Es la lectura tan importante como nos dicen? ¿Qué efectos reales tiene sobre nuestras capacidades cognitivas? ¿Y sobre las de nuestros adolescentes? ¿Puede ayudar a que los jóvenes se construyan una personalidad más sana y equilibrada?
Miguel Salas Díaz, profesor y escritor, responde a todas estas preguntas en este breve ensayo que analiza el papel que juegan la sociedad, la escuela y la familia en la falta de entusiasmo con la que hoy abordan la lectura los adolescentes y propone consejos e ideas prácticas para que puedan acompañar a los estudiantes en el proceso lector.
Es evidente que para leer hay que comprender lo que se lee, hay que saber interpretar lo que se lee y hay que disfrutar con lo que se lee. De lo contrario el libro será una pesadez, nos dará sueño, aburrimiento y ganas de dejarlo. Por eso es muy importante que cada persona encuentre el tema sobre el que le gusta leer, de esa forma ampliará sus conocimientos, podrá reflexionar y sabrá disfrutar con la lectura.
Comparto con Salas que la familia debe involucrarse en la lectura desde que son pequeños, no podemos olvidar que los adultos somos modelos para ellos y si nos ven leyendo querrán imitarnos y ahí empezará su primera motivación por la lectura. También en la escuela debemos seguir fomentando la lectura como proceso importante en el desarrollo personal del alumnado. La lectura debe ser algo transversal en todas las áreas de conocimiento, no podemos circunscribirla solo al área de Lengua y Literatura.
En este libro se nos dan pautas para seguir entusiasmando al estudiante y que la lectura forme parte de sus vidas hasta llegar a echarla de menos cuando las circunstancias lo impidan. Dice Basanta «No lee el que no tiene tiempo sino el que no tiene el deseo…» «Leer es detenerse, observar, escuchar. Leer es interpretar. Leer es comprender. Leer es cosechar. Leer es tejer. Leer es surcar. Leer es elegir. Leer es discutir con el texto. Leer es transformar. Leer es asimilar. Leer es compartir…» (Leer contra la nada. Antonio Basanta).
La actitud principal de todo verdadero lector, continúa Basanta, es la rebeldía, porque quien lee profunda y comprometidamente, se rebela: contra el pensamiento único, contra las verdades impuestas, contra el falso conocimiento, contra la superficialidad que ahoga la profundidad de las palabras, contra la devastación de la intimidad, contra la dispersión, contra la desmemoria, contra la banalización de la información, contra la ausencia del criterio, contra el feroz individualismo, contra el egoísmo, contra el adanismo, contra el vacío gregarismo, contra el ruido que agosta el silencio que no calla, contra el pavor a la soledad, contra la instantaneidad que destruye la secuencia del pensar, contra la prisa que anula el valor supremo de la pausa y de la espera, contra el academicismo, contra la erudición, contra la ociosidad de pensar, contra la incapacidad de sentir, de imaginar, contra el deber de comprometerse, contra el discurso sin acción, contra la muerte de la utopía, contra la ausencia de la empatía…
«Somos seres entretejidos de relatos, bordados con hilos de voces, de historia, de filosofía y de ciencia, de leyes y leyendas. Por eso, la lectura seguirá cuidándonos si cuidamos de ella. No puede desaparecer lo que nos salva. Los libros nos recuerdan, serenos y siempre dispuestos a desplegarse ante nuestros ojos, que la salud de las palabras enraíza en las editoriales, en las librerías, en los círculos de lecturas compartidas, en las bibliotecas, en las escuelas. Es allí donde imaginamos el futuro que nos une». (Manifiesto por la lectura, Irene Vallejo.Siruela, 2020)
Para qué leer de Paulo Cosín, Morata, 2022 podríamos decir que es una animación a la lectura que embebe otros muchos libros que dan justificación a las palabras del autor para animar a la lectura, para ayudar a los jóvenes a comprender el mundo y crear un diálogo comprensivo que les haga tener sus propias ideas y pensar de forma crítica en la sociedad que viven.
Hay mucho escrito sobre motivación a la lectura pero lo más importante es que el lector o la lectora encuentre su tema sobre el cual quiere aprender, entretenerse o divertirse, nadie puede obligar a leer, es algo íntimo que hay que hacerlo de pleno convencimiento, por este motivo es tan necesario que los niños y las niñas vean en sus familias que leen, que lo comentan, que se lo pasan bien, que no es un martirio que mandan en la escuela los maestros y las maestras.
Salas defiende que leamos en clase que es otra forma de motivación para el alumnado sobre todo si el tema de lectura está elegido de acuerdo con el personal que escucha y se transmite con la necesaria pasión que puede producir dicha lectura. No perdamos tampoco la costumbre de la lectura colectiva por parte del alumnado, esa hora, fijada en horario, en la que se van rotando para leer, es otro motivo de motivación que da pie a dialogar, a reflexionar, a aclarar vocabulario, a aprender a redactar…
El autor nos documenta cómo fomentar la lectura en los adolescentes porque: leer es divertido…, pero no solamente divertido; leer mejora la capacidad de expresión y el rendimiento académico; leer sirve para relajarse; leer sirve para ensimismarse (y crear): el concepto de flow; leer sirve para evadirse: huir no es de cobardes; leer nos ayuda a aprender de los grandes: la selección universal al alcance de la mano; leer sirve para disminuir la brecha social.
En definitiva, nos dice Salas, que la lectura tiene ventajas más que evidentes y debemos entusiasmar al alumnado, tanto en las escuelas como en las familias, y para eso es importante que vayamos dando ejemplo desde que son pequeños.
Salas concluye el libro diciendo que tiene la certeza de que no existe una receta válida que transforme por arte de magia a todos los adolescentes en lectores, pero que con este libro intenta proponer una combinación de estrategias, un plan articulado de medidas que pueden ayudarnos a conseguirlo.