Reina, maga, sultana, bruja. Lo ha sido todo por un rato frente a nosotros. Ataviada como una azafata de la retrógada serie «UFO», pero aún más estilosa, ha presumido de dotes de gimnasta y ha coreografiado profusamente cada canción, en un show que abrió con algunos de los temas más eficaces de su «Mantaray». Cercana, bromista y polÃglota, ésta es la nueva Siouxsie: nos dice guapos y guapas y se muestra orgullosa, tranquila en un repertorio que, quizá, no perdure en el tiempo, pero por ahora es el suyo. Por encima de «madonnas» y fenómenos varios, ella arrastra el saber hacer de muchos años de escenario; ahora bien, no esperábamos verla moverse en competencia con Shakira. «Here comes that day», «Loveless» o «Drone Zone» han ilustrado a la perfección a esta magmática mujer en su nueva faceta, que también tiene tiempo para desempolvar algunas de sus viejas y recordadas canciones («Hong Kong Garden», «Christine», «Israel»…); aunque el antiguo repertorio en las manos de estos nuevos músicos suena como una sinfonÃa tocada por un grupo de cámara, la oscuridad más punzante ha llegado con una carismática interpretación de «Nightshift». No deja de tener su poderÃo de bruja, pero ahora también puede ser hada buena.
Mejor momento: esos ojos alucinados con que nos miraba la diosa, en los gorgoritos finales de «If It Doesn’t Kill You».
// Publicado en Fiber Lunes 21 de julio //
Carolina,cariño,encontre tu blog gracias a tu hermana,mira el mio,http://sonukumawat.blogspot.com,te recuerdo siempre,Alicia.